¿Quieres aprender cuales son los nueve hábitos que transformarán tu vida financiera? ¡Apréndelos aquí, en Consejo Financiero!
Cuando era niño, uno de los hábitos que más me costó incorporar en mi vida fue lavarme los dientes en la noche. Recuerdo que una pelea fija con mi madre a la hora de irme a la cama era tener que lavarme los dientes. No sé porqué, pero hacer este pequeño acto me causaba una profunda amargura, a tal punto que tan solo recordar que tenía que hacer esto al final del día, me amargaba planes tan agradables como ver la tele o ver los partidos del América de Cali en la copa libertadores de américa.
Bueno, pues te confieso que esta lucha siguió durante toda mi adolescencia y el comienzo de mi adultez, hasta cuando las caries empezaron a salir y tras ir al odontólogo, me di cuenta que ya no era tan “Cool” tener esas feas amalgamas o calzas dentales negras en mi dentadura… En otras palabras, tras sufrir las primeras consecuencias de mi descuido, tuve conciencia de la importancia de la higiene dental y finalmente lavarme los dientes se convirtió en un agradable hábito, que actualmente hago naturalmente sin pensar.
Y estoy convencido de que los hábitos, los buenos hábitos me refiero, son como esos ladrillitos con los cuales construimos nuestra vida, como lo dice el siguiente proverbio:
“Siembra un pensamiento, cosecha una acción; siembra una acción, cosecha un hábito. Siembra un hábito, cosecha un carácter; siembra un carácter, cosecha tu destino”.
Y así como la vida se construye con buenos hábitos, las finanzas personales también. Lo que más cuesta no es entender los principios financieros que hemos visto durante muchos episodios de este blog y de mi podcast, lo difícil es convertir esos principios en hábitos. Ahí es donde está el principal reto y en donde más nos cuesta cambiar.
Los hábitos son simplemente esos sencillos actos repetidos con frecuencia o regularidad, que se convierten en una práctica habitual en la vida de un individuo.
Mira, leer este artículo o escuchar mi podcast no es lo que va cambiar tu presente y futuro financiero, sino los conceptos y principios que escuches aquí y que pongas en práctica y sobretodo: que repitas con frecuencia.
Las finanzas personales no son una carrera de 100 metros, son una maratón, donde debes repetir una y otra vez buenos hábitos financieros durante toda tu vida. Ese es el secreto: Aprender principios y ponerlos en práctica sin cansarte. Nada más.
Pues he preparado para ti los 9 hábitos financieros que a mi juicio son los más importantes para transformar tu vida financiera. ¿Me acompañas?
Hábito # 1 – Llevar un presupuesto
Bien. Pues el primer hábito financiero que debes poner en práctica todos los meses de tu vida, seas un adolescente, un cuarentón o una persona en sus años dorados es llevar un presupuesto, entendido éste como la lista de ingresos y gastos que debes hacer antes de gastar el dinero del mes que viene, no después.
Como lo hemos visto en varios artículos de este blog, hacer un presupuesto te permite no gastar más de lo que ganas y ahorrar la diferencia. Cuando haces un presupuesto le dices al dinero a donde tiene que ir, en lugar de que éste haga lo que le de la gana.
Quizás hacer un presupuesto signifique para ti lo mismo que para mí era lavarme los dientes, pero te aseguro que hacerlo te ahorrará muchos de dolores de cabeza. Quizás hacer números todos los meses no es tan divertido, pero cuando veas que finalmente hay orden en tus finanzas, el dinero te empieza a alcanzar y hasta te queda dinero para ahorrar, te enamorarás de esta profilaxis financiera.
Si quieres aprender a hacer un presupuesto que realmente funcione, te invito a escuchar el episodio número 3 de mi podcast.
Hábito # 2 – Ahorrar en automático
Ok. Una vez hayas dominado este primer hábito todo será más fácil dándote paso al segundo hábito, que entre otras cosas es uno de los que menos esfuerzo te demandará y es ahorrar en automático, si, en automático.
Ahorrar en automático parte del principio que vimos en el episodio número 13 de mi podcast que dice: “No ahorres lo que queda después de gastar. Gasta lo que queda después de ahorrar”
Lo primero que debes hacer una vez recibas tus ingresos es ahorrar y vivir con la diferencia. Así de simple. Es hacer de cuenta que ese 10%, 20% o el porcentaje que hayas definido ahorrar, nunca te lo ganaste y que debes administrarte con lo que queda.
¿Y como le haces para ahorrar en automático? Pues muy simple, diciéndole a tu empleador que te lo deduzca del sueldo, o a tu banco o fondo de inversión que te lo debite automáticamente de tu cuenta bancaria sin preguntar. Así de sencillo.
Como lo dice Sofía Macias en su libro Pequeño Cerdo Capitalista, un libro del cual hablaremos en un próximo episodio “Quítamelo que me lo gasto”
Esto me recuerda a Maria Clara, una obediente cliente a quien le administraba su fondo de inversión, como un día sintió que se había ganado la lotería.
Pues resulta que un día nos reunimos, hicimos cuentas y encontramos que podía ahorrar un buen porcentaje de sus ingresos cada mes, para lo cual le sugerí que le dijera a su área de nómina le descontará dicho porcentaje y lo enviara a su fondo de inversión. Pues ella hizo caso y empezó hacer este ahorro.
Transcurrieron unos cuatro años y nos volvimos a reunir, para ver cómo estaban sus productos financieros. Pues recuerdo el saltó de alegría que dio, cuando le dije cuanto había acumulado en esos cuatro años. Literal, ¡para ella fue como ganarse la lotería!
Esto en el caso que seas empleado, pero si eres freelance, trabajas por cuenta propia y no tienes ingresos regulares, mi recomendación al respecto es que por favor, todo lo que te ingrese, sea mucho o poco deposítalo en tu cuenta bancaria y basado en un promedio de tus ingresos mensuales, autorices a tu entidad financiera a que te descuente un valor fijo de ahorro automático.
Cuando consignas todos tus ingresos en una cuenta bancaria, le das orden a tu dinero y además puedes ahorrar periódicamente.
La gran ventaja de ahorrar en automático es que no se siente, y puedes llegar a tener una pequeña fortuna al cabo de un tiempo. Te invito a escuchar el episodio número 13 de este podcast donde trato este tema con mayor profundidad. ¿Ok?
Hábito # 3 – Pagar todo por internet
Bien. Como tu tiempo es dinero, el tercer hábito financiero que te recomiendo adquirir es pagar lo que más puedas por internet: Los servicios públicos, tus suscripciones, la hipoteca, los seguros y en general lo que más puedas sin tener que salir de tu casa o lugar de trabajo. Mira: perder tiempo haciendo una cola de banco es botar tu dinero a la basura. ¿Por qué?
Porque tu tiempo vale. Y para cuantificar cuánto vale, debes calcular cuánto vale una hora de tu tiempo.
Si por ejemplo, trabajas en una empresa y te ganas $2,000 trabajando 8 horas diarias durante veinte días al mes, significa que una hora de tu tiempo vale $12,5 dólares. Si usas tiempo de tu trabajo para ir a pagar el colegio de tus niños al banco, le estarás robando este tiempo a la empresa donde trabajas.
Y el tema es aún más critico cuando trabajas por cuenta propia. Si por ejemplo, en promedio te ganas $2,500 dólares trabajando juicioso 20 días al mes 8 horas diarias, significa que si gastas una hora de tu tiempo para ir al banco a digamos pagar tus impuestos, habrás dejado de ganar $15 dólares con 62 centavos!
En definitiva, tu tiempo vale dinero y apalancarte en la tecnología te ayudará a ahorrar tiempo y a ganar dinero. ¡No seas un cavernícola financiero!
Hábito # 4 – Ser paciente
Perfecto. Y seguimos con el cuarto hábito financiero consistente en ser paciente, uno de los hábitos más difíciles de formar, y más en esta sociedad de consumo.
Ser paciente es simplemente el hábito de esperar a tener el dinero suficiente para comprar, Es desarrollar la gratificación diferida.
Bueno ¿y qué es eso de la gratificación diferida? pues es la capacidad de un individuo de posponer una recompensa presente por una mayor en el futuro. Este es uno de los principales hábitos que debes desarrollar si quieres tener unas finanzas personales sólidas, hábito que demandará de ti una gran dosis de dominio propio.
Para desarrollar este importante hábito es fundamental entender que las emociones son el peor consejero a la hora de tomar decisiones financieras y algo que te puede ayudar muchísimo a desarrollar este hábito es no gastar lo que no esté registrado en tu presupuesto.
Así cuando veas esas relucientes botas o ese flamante I watch en oferta en la vitrina, no solo te evitará comprar por impulso, sino que te obligará hacer un campito más en tu presupuesto para obligarte ahorrar y después si a comprar. Puede que pierdas el descuento, pero sí que te ahorraras los costosos intereses de adquirirlos con deuda o incluso ya con cabeza fría, con el paso de las horas o los días te darás cuenta que no eran cosas que realmente necesitabas ¿ves?
Hábito # 5 – Hacer una lista de compras
Vale. Y esto nos lleva al quinto hábito financiero que se relaciona bastante con hacer un presupuesto y es hacer una lista de compras antes de salir a gastar.
Si por ejemplo, pusiste en tu presupuesto que te gastarías haciendo mercado digamos $300 dólares, debes hacer algo que muy pocas personas hacen y es hacer una lista detallada antes de ir al supermercado.
Y esto sí que lo saben muy bien los supermercados, quienes ubican estratégicamente los estantes, el sentido de los pasillos e incluso el espacio de las cajas de pago para asegurarse que veas todas las ofertas que están haciendo y te antojes, muchas de ellas de productos que no necesitas y que terminas comprando si no vas armado de tu lista de compras.
Mira: cuando compras cosas en oferta o con descuento, en la mayoría de los casos, no estás ahorrando dinero. Lo que realmente estás haciendo es gastar de más y lo peor es que estás dejando de comprar lo que realmente si necesitabas o terminas sobrepasando los $300 dólares que tenías presupuestados.
Y esto aplica para cualquier jornada de compras que vayas a realizar: comprar la ropa para tu familia, hacer las compras de navidad o simplemente ir a comprar ese bolso o esos jeans que presupuestaste con anterioridad, cuyos vendedores ni cortos ni perezosos no escatimarán esfuerzos para venderte algo más con ellos. Cuando tienes una lista de compras te enfocas en adquirir lo que necesitas. Nada más.
Hábito # 6 – Pagar de contado, no a crédito
Bien y esto nos lleva a uno de los más importantes hábitos financieros. Y es al sexto hábito financiero, consistente en pagar de contado, no a crédito.
Te has preguntado ¿porque los grandes supermercados y grandes tiendas por departamentos ofrecen sus propias tarjetas de crédito? fácil, porque es un muy buen negocio, tanto que muchas de estas empresas ganan más por el negocio de prestar dinero que por vender sus productos.
Y es muy atractivo, pues todas estas empresas te ofrecen descuentos por pagar con sus tarjetas de crédito… Lo que no te dicen es que los intereses que te pueden llegar a cobrar son muy superiores a los descuentos que te hacen. No solo ganan por sus ventas, sino por los jugosos intereses que ganan al financiarte las compras. Negocio redondo, ¿no?
Y quizás tú me puedas decir: Fernando, yo pago siempre a una cuota, no pago intereses y además me gano los descuentos…yo sí que se manejar inteligentemente mi tarjeta de crédito…
Pero ¿Sabes qué? Si esto realmente pasara, no sería atractivo para estas compañías ofrecer tarjetas de crédito… ellos saben muy bien que cuando tienes tarjeta de crédito tarde o temprano tenderás a gastarás de más y llegarás a un punto donde no podrás pagar a una cuota y tendrás que empezar a diferir tus compras y por ende a empezar a pagar intereses… es cuestión de tiempo. Lo he visto.
¿La solución? Paga con tu tarjeta débito o en su defecto en efectivo todas tus compras de consumo, ajustándote a tu presupuesto y a tu lista de compras. Recuerda: No te endeudes para consumir. Las compras de consumo no se hacen con crédito. se hacen de contado.
Hábito # 7 – Registrar todos tus gastos
Perfecto. Y esto nos lleva al séptimo hábito y es a registrar todos tus gastos, porque hacerlo es la única manera de asegurar que estás ejecutando bien tu presupuesto, es decir, cerciorarte que estás gastando tu dinero en lo que planeaste y en las cantidades correctas día tras día. Una cosa es hacer tu presupuesto, y otra muy diferente es llevarlo a la práctica.
La ejecución del presupuesto es algo que debe medirse todos los días para evitar que gastes de más y registrar los gastos es clave para lograrlo, pues lo que no se mide, no se puede mejorar.
Y registrar los gastos incluye todo desembolso, grande o chiquito, que hagas: Como el café de las mañanas, el taxi que tomaste para ir a la oficina, tus almuerzos, la blusa que compraste, la invitación a cenar a tu novia, el pago de la factura de tu celular, el corte de cabello, en definitiva todo, absolutamente todo.
El hábito de registrar los gastos es otro de los que requiere de fuerza de voluntad, pues es el más repetitivo de todos los hábitos financieros, debido a la gran cantidad de operaciones que podemos llegar hacer en tan solo un día, pero una vez lo has adquirido, será tan natural como respirar.
Hay muchas maneras de hacerlo, desde las más rudimentarias hasta las más modernas. A continuación te sugiero dos formas.
La primera de ellas es simplemente guardando todas las facturas o si no te dieron factura, registrar los gastos en una libreta y totalizar al final del día todos tus gastos en un libro de registro o en una hoja de Excel. Como imaginarás esta es la forma rudimentaria, pero si la haces a diario también es muy efectiva.
La segunda forma es descargar una app en tu celular con la cual puedas registrar tus gastos, en el mismo momento que lo haces. Hay muchísimas aplicaciones, pero la que te recomendaría usar es la que yo uso, que se llama Homebudget, que en español significa presupuesto del hogar. Con esta aplicación puedes hacer muchas cosas:
- En primer lugar, puedes transcribir y tener tu presupuesto en la aplicación, personalizando cada una de las categorías del mismo y establecer los valores para cada rubro.
- En segundo lugar, puedes registrar los gastos en el momento que lo hagas de manera muy rápida, en cuestión de segundos. Es muy chévere.
- En tercer lugar, puedes ver gráficos en colores que te permiten ver cómo va la ejecución de tu presupuesto, permitiéndote ver si vas conforme al plan, si estás a punto de sobrepasar el mismo o si ya lo excediste, así como generar informes para saber cuánto has gastado en cada rubro o categoría al cabo de cada mes o en cualquier periodo de tiempo, lo cual te permite hacer ajustes y tomar medidas.
- Y como si fuera poco, si eres casado, puedes sincronizar la aplicación con tu conyugue y los dos pueden ingresar gastos en cualquier momento, consolidando prácticamente en tiempo real la ejecución del presupuesto.
Esta aplicación la puedes encontrar en el appstore de Itunes o en el el Google Play para Android. Existe la versión gratis y la de pago. Ensáyala y me cuentas.
Hábito # 8 – Invertir
Perfecto. El octavo hábito que te recomiendo desarrollar que te conducirá a la acumulación de riqueza es acostumbrarte a invertir, entendido éste como el hábito de poner un porcentaje de tus ingresos en activos que te generen más dinero. No basta sólo con ahorrar en automático, sino que debemos trasladar una buena parte de ese dinero y trabaje para nosotros.
No me voy a detener mucho en esto, pero idealmente deberías tener el hábito de invertir al menos una vez al año, en activos como inmuebles, el mercado de valores, tu propio negocio o tu plan de retiro. Te invito a escuchar el episodio número 20 donde hago un resumen del libro “El millonario de al lado” donde aprendemos como invierten los verdaderos millonarios o el episodio 22 en el que hablo de la inversión con mayor detalle.
Habito # 9 – Dar con generosidad
Y finalmente hemos llegado al hábito # 9, que te alejará de la avaricia, la tacañería y el materialismo: y es dar con generosidad.
Acostumbrarnos a dar a otros con regularidad no es sólo fuente de una inmensa satisfacción sino también la oportunidad de construir una mejor sociedad. ¿Si hemos recibido en abundancia porque no dar en abundancia también? El dinero no está hecho sólo para acumularse, sino para hacerlo fluir hacia aquellas personas que también lo necesitan.
Puedes dar a tu iglesia, a una fundación o causa que compartas o simplemente a aquella familia que está pasando por un tiempo de escasez. La generosidad debe convertirse en algo habitual que practiquemos todos los meses. Te invito a escuchar el episodio # 60 de este podcast titulado “hay mayor provecho en dar que en recibir” donde hablo de este hábito con mayor profundidad.
Para concluir.
Ok. Estos fueron los nueve hábitos para transformar tu vida financiera. Si construyes buenos hábitos, tendrás una buena vida.
Cuando le preguntaron a Thomas Alba Edison, el inventor de la bombilla eléctrica el secreto de su genialidad dijo: El genio es el resultado de la suma de un 1% de inspiración y un 99% de transpiración, queriendo explicar que la razón de su éxito se debía principalmente al hábito de intentar una y otra vez con sus experimentos hasta lograr el invento deseado. De hecho, para inventar la bombilla eléctrica, tuvo que intentar más de 1000 veces antes de llegar al producto definitivo.
Pues las finanzas personales son esto mismo: un 1% de inspiración y un 99% de transpiración, es decir, la implementación de hábitos repetitivos en nuestra vida financiera, que nos lleven a una real transformación de nuestro dinero.
Si no sabes por dónde empezar, te invito a comenzar con un hábito a la vez, en el orden que te propongo en este episodio, hasta completar los nueve. ¿Aceptas el reto?
Si quieres escuchar el episodio Podcast de este artículo, ve a:
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